7/2/09

Antony & The Johnsons - The Crying Light

Cuatro años se ha hecho de esperar Antony con su nuevo disco, y la verdad es que después de “I am a bird now” supongo que no le habrá resultado nada fácil buscarle una continuidad digna a semejante discazo.

Finalmente “The crying Light” cambia el mensaje pero no el envoltorio. Todas las canciones del disco siguen manteniendo unos arreglos cuidadísimos, en su justo punto, bonitos pero sencillos. Violines, pianos, y sutiles guitarras se mezclan armoniosamente con el instrumento principal: la impresionante voz de Antony.

La temática de las letras cambia, y ahora Antony emerge de sus propias sombras para reencontrarse con la naturaleza, pero no en plan “discurso ecologista a lo Björk”, sino que se sirve de ella para volver a mostrarnos su mundo de una manera más metafórica y menos directa que en el disco anterior, pero no por ello menos bella.

“The crying Light” introduce alguna canciones más optimistas a lo que es habitual en su repertorio como el segundo single "Epilepsy is dancing" y sobre todo la genial y pegadiza “Kiss my name”.


Pero son las que siguen un tono más sobrio las que se sobresalen algo sobre el resto. Es el caso de la escalofriante “Daylight and the sun”.


Aunque si me tengo que quedar con una sola canción del disco elegiría el cierre “Everglade” que condensa perfectamente todo lo que esta obra me transmite: una mezcla perfecta entre soul, pop y lírica.



Nota: 9

Ascuo.

3 comentarios:

  1. Anónimo7/2/09

    acabo de oir los temas que has puesto en el artículo, me encantan, creo que he de hacerme con el disco pero ya!!!

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  2. Anónimo9/2/09

    Antes de nada, el disco es un homenaje al bailarín Butoh, Kazuo Ohno (imagen de portada).

    Escuchar a Antony requiere una aplicación sensorial que no requieren la mayoría de artistas, por eso no está al alcance de cualquiera.

    Lo malo que tiene es que su obra está siendo acaparada por pelis lacrimógenas y por anuncios de colonias baratillas.

    Parece un trabajo más pero no es así, aunque todo sigue vertebrado en torno al piano de Antony, hay inclusiones de nuevos intrumentos muy interesantes. Además yo creo percibir que aunque sigue siendo un disco muy íntimo, es mas positivo y aperturista que los anteriores, Antony refleja no alegría (joer un tema se llama Epilepsy is Dancing) si al menos un cierto punto de vista de la vida creo que más hermoso, a mí me encanta el LP.

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  3. Anónimo9/2/09

    Supongo que es ese sentimiento de que no a todo el mundo le guste,lo que a los que si nos hace ser un poco mas radicales(en el buen sentido de la palabra).

    En serio que cualquier cosa que escucho despues de él me parece no tener sentimiento ni calidad,asi que lo que hago cuando quiero escuchar otro grupo de musica no lo pongo al principio...normalmente lo echo de menos y acabo poniendo al bueno de Antony.

    La verdad es que no lo recomiendo a mis amistades o familiares,porque me sabe muy mal cuando lo critican porque creo que no todo el mundo lo entiende...estoy loco por ir a uno de sus conciertos.

    Me queda como algo intimista,para mi y que no tienen porque entender los demas y no me importa tampoco.

    De la calidad de su musica supongo que intuis mi opinion.

    En cuanto al ultimo disco queda mas como una logica continuacion de su obra,el primer LP era el mas personal y radical,incluso nombra a hitler en una de sus canciones...I am a bird now,era simplemente necesario para darse a conocer,supongo que recomendado por boy george,lou reed & co.,es en el que mas habla de su ambigüedad sexual,incluso él dice no sentirse muy de acuerdo con sus sentimientos de mediados de los 90( y el disco salio en 2005 )que fue cuando escribio muchos de los temas.

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